“Es importe asumir la gestión de un tambo como un proceso industrial”. Así lo sugirió el experto argentino Ricardo López Mayorga, en una charla titulada Producción de leche en Uruguay: una experiencia basada en procesos y mejora continua. La actividad fue organizada por el grupo Conaprole en el marco de la última edición de la Mercoláctea. 

López señaló que para tener una óptima gestión es clave contar con personal capacitado en todos los procesos. “En una industria se requiere un detalle y documentar bien qué tareas voy hacer. En los tambos debemos hacer lo mismo”, planteó. Eso ayuda a identificar fallas y a determinar factores que afectan la productividad de los tambos. “Por ejemplo: una vaca fuera del tanque de frío es un desperdicio”, señaló.

El experto y productor lechero argentino, señaló que asegurar la “repetividad” y “continuidad de los resultados” —como se trabaja en un proceso industrial— es un gran aliado para que los tambos logren mejoras significativas en sus resultados económicos. “Si uno tiene los procesos controlados, tiene los resultados deseados. Eso en la lechería se puede aplicar perfectamente”, afirmó.

Esto tiene algunos desafíos como la “diciplina” en la ejecución de las distintas tareas. Además, consideró que se deben atacar la “tolerancia” a los defectos, y puso como ejemplo los desperdicios de comida en los comederos de las vacas.

Premios al personal y “mostrar los números”

Uno de los puntos donde López Mayorga hizo especial foco es en lo que paga tener personal “adecuadamente capacitado y entrenado” en las tareas que requiere “todo el proceso del tambo. “Un programa de capacitación que no evalúa, no es un buen programa. No hay que tener miedo a evaluar a las personas”, afirmó. Añadió que, en general, lo recomendable es que cada empleado tenga una capacitación de 40 horas (una semana) en el año, y que se “otorguen premios económicos” al desempeño en forma periódica, no una vez año. “El premio tiene que ser significativo y ciertamente frecuente”, acotó. Añadió que eso ayuda al personal a recordar lo que “hace bien” y también “fomenta la competencia”.

Por otro lado, consideró como vital que el responsable del tambo “tenga convicción de lo que hace” porque eso ayuda a resolver los problemas con más facilidad.

Asimismo, habló sobre un tema tabú para muchos propietarios de tambos, que es su “resistencia” a mostrar los números del negocio con sus subordinados. “Hay que tener una actitud de transparencia a la hora de mostrar los resultados económicos del negocio”, afirmó López, quien indicó que esto ayuda a que el personal pueda tomar mejores decisiones en un futuro.

El experto recalcó en la importancia del método de origen japonés de “mejora continua” en los procesos porque está demostrado que esto conduce a “mejores resultados económicos y productivos. No es nada extraordinario de aplicar”, consideró.

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